Villafranca en portadas de discos

Ojalá hubiera más de una, pero lo dudo.  Villafranca como bien sabeis es rica en gastronomía así que es un punto de parada fija para repostar en muchas de las giras de grupos que pasan por la A6  hacia Galicia o hacia León, Castilla y demás. En una de esas paradas (el el mesón Don Nacho), los Fleshtones (una de las bandas más importantes del garage internacional de todos los tiempos) decidieron sacarse unas fotos  en la calle Barbuliña que acabaron siendo la portada y contraportada de este single de siete pulgadas titulado "Bite of my Soul".

La casa más vieja de Villafranca

Sita en el número 31 de la calle de Agua tenemos la construcción civil más antigua que queda en Villafranca. Probablemente sea del siglo XV. Es de estilo morisco y la planta baja probablemente fuera usada como comercio; a través de esa ventana el dueño del negocio le daría sus productos a los clientes. Teniendo en cuenta que gran parte de los negocios podrían estar en manos hebreas, es probable que esta casa perteneciera a algún comerciante judío.

Judíos en Villafranca (La Judería de Villafranca del Bierzo)

La presencia en Villafranca de población hebrea está intimamente relacionada con el Camino de Santiago; los judío conocían bien la importancia y las posibilidades económicas de este y se establecieron en Villafranca del mismo modo que lo hicieron en otras localidades jacobeas como y sólo por citar las de la provincia Sahagún, Mansilla de las Mulas, León, Astorga, Bembibre, Ponferrada, Cacabelos y Vega de Valcárce. 

Cabe destacar la cohabitación pacífica y tolerancia en el territorio de la actual provincia, ya que hubo una ausencia casi total de linchamientos y persecuciones. Tan solo hay documentadas dos: una en Cea en 1127, y otra en León en 1449 (que respondió a intereses políticos).

Las actividades económicas de los judíos leoneses aparecen reflejadas en los documentos medievales (compraventas de casas y propiedades rústicas, arrendamientos, etc.) A diferencia de otras zonas españolas y europeas, muchos cultivan la tierra. Poseen molinos. Los dedicados al préstamo, la usura y la recaudación de impuestos se localizan en los grandes núcleos de población (sobre todo en León, Sahagún y Mansilla, en el Camino), pero no parecen ser demasiados respecto a la población judía total. Pagaban algunos impuestos más que los cristianos, pero este tipo de discriminación también ocurría en territorio musulmán, por lo que no debió de haber muchas protestas.

-Población: a tenor de la distribución de impuestos entre los hebreos leoneses, en nuestra Provincia habría unas 761 familias en 1474. Si aceptamos que cada familia tenía una media de 6 miembros, en total serían 4566 habitantes, aunque actualmente se barajan cifras más bajas.  La mayoría vivían en León, Sahagún y Ponferrada.

-La expulsión de 1492: no se sabe con certeza, pero los judíos leoneses debieron optar en su mayoría por marchar a través de la frontera portuguesa. Sí que hay referencias que indican que los judíos de Villafranca salieron por los puertos gallegos (La Coruña, Ferrol), pero el grueso de los hebreos de León debió salir de la provincia por Sahelices y Puebla de Sanabria. Al parecer, muy pocos regresaron aceptando el bautismo, aunque no sabemos qué porcentaje optó por esta medida desde el primer momento del Decreto de Expulsión.

-VILLAFRANCA DEL BIERZO

No hay menciones de judíos hasta el siglo XII, pero a partir de esta fecha se vislumbra un importante núcleo judío. En 1175 el señor era Nuño Peláez, y delegó en tres alcaldes, uno de los cuales era hebreo: esta situación se repitió en el futuro. Es algo totalmente inusual.

Esta población también aparece solapada por la aljama de Ponferrada en materia tributaria.

Algunos judíos de Villafranca se vieron implicados en una red ilegal que trataba de sacar los metales preciosos y las joyas de los expulsados, actividad que estaba prohibida.

Algunos salieron por la Coruña, y otros pocos por Portugal. Unos pocos se convirtieron al cristianismo en el exilio, regresaron, y recuperaron sus bienes (o lo que quedaba de ellos).

Más información sobre los judío en León en el blog de donde he sacado esta información: http://corazonleon.blogspot.com.es/2012/10/juderias-y-judios-de-leon-en-la-edad.html

La Meona: Caca

Tras este escatológico título, se esconde la historia de La Meona. Nuestra querida fuente es, tras el ídolo de Villafranca que podemos ver en el Museo de Ciencias Naturales, el más antiguo de los monumentos villafranquinos. De origen romano, la estatua representa a Caca: hija de Vulcano , diosa del hogar y precursora de la diosa Vesta. Caca era la hermana de Caco, el ladrón de ganado y por el que a todos los ladrones del mundo se les conoce ahora como cacos.
Originalmente la estatua estaba en Bergidum Flavium aunque posteriormente sería trasladada (¿cuándo? no lo sé) al Monasterio de Carracedo y de allí a Villafranca.

Callejero villafranquino 5: calle del Castillo

Obviamente el nombre de esta calle no tiene secreto. Se llama así porque es la calle que va a dar al castillo de Villafranca. Si he elegido dedicarle el callejero a esta calles por dos razones. Primero para recordar que en ella estuvo sito el antiguo convento de la Laura en lo que ahora es un solar del desaparecido hotel Comercio. Este convento fue fundado por María de Toledo y Colonna, duquesa de Alba, a finales del siglo XIV y en él había una copia de la sábana santa de Turín. Tras arder en el siglo XVII fue trasladado a Valladolid (no las piedras, si no las monjas y suponemos que el sudario y demás).
La segunda razón es de tono más negro. Mi abuela Marina me contó hace ya años que en esta calle se había producido el único asesinato que ella recordaba: al parecer en la curva donde se entra al callejón del Mudo se produjo un crimen pasional en el que un marido despechado mató al amante de su mujer (eso creo recordar). Fue condenado al destierro en tierras gallegas.